jueves, 24 de mayo de 2012

Rennard

Rescato un pequeño texto de hace muchos años, del 2004 mas o menos.

Rennard no podía más, una relación estable junto con una situación familiar honrosa hacía de él un joven apuesto sin necesidad de más en la vida, pero algo anhelaba, no sentía la aventura que tantas y tantas veces los pobres sirvientes contaban en sus días libres en la parte de atrás de su cobertizo mientras bebían los licores de sus lejanas y arduas tierras, lares del planeta en los cuales la relación iba mas allá de lo políticamente correcto, allí donde el clima hacía arder los cuerpos y llevar a cabo apasionados ritos... pero Rennard desolado solo podía leer, beber, leer, beber y dejarse llevar mientras su cuerpo, independiente tras largos momentos dados a la bebida, deslizaba sus manos sobre él complaciéndose a si mismo mientras esperaba el matrimonio con su dulce dama de buena familia que el padre encomendó a su bendita y respetada madre.

Rennard soñaba con los placeres de la carne, pero en todos sus sentidos, grandes libros traídos de la Europa más oriental, narraban historias de extraños seres que se alimentaban de la sangre de sus victimas y amantes fuesen niños, niñas, fulanas, infantes o cualquier ser repleto de sangre... También leía historias traídas de las colonias del continente negro donde primitivos seres comían la carne de los suyos y privaban de placeres sexuales a las mujeres robándoles su fuente de placer.

Ya no podía más, meses y meses de letargo, de castidad y respeto hacia con su pareja, un día, tras aparecer ella en una de sus sesiones amatorias e intimas con la botella, el noble joven no pudo más y cogió por la cintura a Anne y a la alfombra cerca de la chimenea la llevó, desgarrándola la ropa, bañándola en licor y dándola de beber, la joven enloqueció con la opiácea bebida traída de las oscuras tierras esclavas y su cuerpo y mente se dejaron llevar por la perversa y torturada mente de Rennard, el cual comenzó a besarla y morderla los labios hasta hacerlos sangrar levemente para así poder revivir las historias de la Europa balcánica; se aferraba a su cuello mientras sujetaba sus muñecas apoyadas en la rejilla de hierro de la chimenea. Ardiendo interior y exteriormente, Anne se estremecía y su amante aferraba más sus calcinadas manos mientras mordía sin piedad su desnudo cuello provocándola incisiones en varios puntos y entonces se cebó con el resto de su cuerpo, la ató las manos para poder estar libre mientras ella se debatía en los placeres y el dolor, cruzándolos en un dolor placentero y un doloroso placer. Rennard cogió un abrecartas para así poder cortar su bella y tersa piel de fragancia intensa y cual animal lamerla dejando sus labios impregnados en sangre hasta que beso tras beso, corte tras corte, dejó el abrecartas para hundirse en el pudoroso monte de Venus de su prometida, saciando su sed en la fuente del placer de su amada la cual se abandonó a él olvidándose de las llamas que se alimentaban en sus manos.

Rennard estaba pleno, perdido en su perfecto mundo de confusión y caos, bebiendo de su dama, entregándose al cuerpo y sin poder refrenarlo sintió la necesidad de alimentarse de ella y privarla de su fuente para poder así tenerla sólo para si mismo, entonces, entregado a la locura y a las fantasías que los libros le brindaba, de un fuerte mordisco se quedo para si con el sexo de su amada, y esta vencida se dejó dominar por los ríos de sangre que manaban de sus calcinadas manos, de sus firmes y rosados pechos, de su robado sexo y de su hermoso cuello... Anne murió en pleno éxtasis y Rennard, acurrucado en un oscuro rincón se quedo saboreando la esencia del cuerpo de su amada, hora tras hora, con la cara desquiciada y el cuerpo contorsionado, hasta que delirante le encontraron los sirvientes, los cuales espantados provocaron el revuelo al ver ante ellos a Lucifer desafiándolos... La cordura abandonó del todo a Rennard, el cual tras echarse a por los criados, trastabilló en la escalera rompiéndose el cuello, con la imagen de su madre llorándole y del que iba a ser su suegro castigándole por lo hecho a su hija, Rennard se abandonó a la muerte tranquilo en su desquicio, preparado para arder en los eternos fuegos.

Lo correcto de los errores

Despiertas y no sabes el dia o la hora que es, da igual, en tu vida ha dejado de tener sentido. Pasas tres dias perdido y otros cuatro en el que le pierdes la pista al sueño. Caes en cabezadas que duran minutos y te relajan como horas y sucumbes a siestas de horas que no te aportan nada de descanso. Tu cabeza no para, no mente no para y tus emociones no son menos.


El camino supuestamente recto te parece tedioso, aburrido y complicado y sin embargo el fango te llama, te atrae seductor. Hueles un problema y lo deseas, pero no dejas de desear también lo ilustre, lo correcto y lo que es luminoso. Luchas con tus demonios que no son mas que otra parte de ti mismo.

"Bastará con saber q puedo entrar en ti otra vez, sin rencor, úsame, seca tus lágrimas en mi piel"

Por suerte siempre hay cosas y personas que estan por encima de un camino y de otro y que escojas el que escojas estan ahi dandote lo que necesitas. Solo darte las gracias por eso.

Foto: http://paiscanelabipolar.blogspot.com.es/
Now Playing: Cobarde - Illogical